Por Tato Ferrer
Debe ser la edad, creo. Estoy haciéndome mayor, muy mayor. Casi me
he convertido ya en un viejo joven, por así decirlo.
Resulta, que a estas alturas de mi vida profesional, es un decir,
un comunicante anónimo, va y etiqueta el artículo: " Vivas for
president...encore une fois", como de políticamente correcto, en Blog de Ceuta.
Hasta ahora, me habían llamado casi de todo.
José Luís Chaves Torcal, una de las personas más inteligentes con
las que he tenido ocasión de trabajar, y con una pluma digna de los mejores
escritores, me planteó en " El Faro", lo conveniente de que, desde el
periódico, se explicara a la opinión pública ceutí, el significado y desarrollo
del proceso autonómico de Ceuta, que aún estaba por cruzar nuestro mar, por
estrecho que sea.
Recuerdo que, en su enorme afán de recabar información y posibles
ejemplos, entrevistó hasta el alcalde de Algeciras, ciudad sobre la que era de
la opinión estaba llamada a convertirse en la capital del Campo de Gibraltar,
en lugar de Cádiz.
Dicho y hecho. José Luís, contó con mi total respaldo para ocupar
las páginas y espacios necesarios, al objeto de plasmar y desarrollar, cosa que
hizo de forma magistral, un tema tan trascendental y, ciertamente, un tanto
desconocido para la población, para la gente de la calle, dado que veníamos del
franquismo.
El, por aquel momento, parlamentario ucelisto, Francisco Olivencia,
novio político de la muerte, de la libertad de expresión en Ceuta, cierta tarde,
me llevó hasta Casa Fernando, en Playa Benítez, y bajo pretexto de invitarme a
tomar un café, intentó de que la línea editorial y de pensamiento de " El
Faro", sólo estuviera a favor del planteamiento único de que Ceuta tenía
que ser parte inherente a Andalucía. Formar con la comunidad o autonomía andaluza.
De la otra vía, la de ser Ceuta por Ceuta, no quería ni oír hablar.
Carmona. Los territorios de Ceuta y Melilla, quedaron excluidos,
quedaron fuera, de Andalucía. Corren para subirse al carro. Se olvidaron pronto
los posicionamientos empecinados, en contra de la actual situación.
Si usted, posible lector, está aburrido, y desea consultar la
hemeroteca en la biblioteca, comprobará que José Luís Chaves, mantuvo siempre,
ambas opciones, sin que Olivencia lograra condicionar, ni un ápice, mi línea
informativa, con su sesgada opinión partidista.
Del novio político de la muerte de la libertad de expresión en Ceuta,
recibí la etiqueta de que mi forma, manera, de entender y ejercer el
periodismo, era de... terrorismo moral. Está publicada su carta con tan cariñosa
catalogación. De nuevo, "El Faro" y hemeroteca. Es decir, era un
terrorista, al fin y al cabo.
Todo un terrorista que ejerció, hasta que lo eliminaron, miren ustedes
cómo las dan los pacifistas, de INDEPENDIENTE. En la cabecera
del diario, figuraba tan añorado y necesitado
concepto.
La derecha, el centro, la izquierda, fuerza nueva, partido comunista,
sindicatos, tuvieron espacio en mi etapa. Siempre bien recibidos. Sin necesidad
de pasar previamente por caja. En aquellos años difíciles, la ventana estaba
siempre abierta a todo el mundo, de forma desinteresada. Conscientes de nuestro
servicio útil a la comunidad. Conscientes de no reconvertir un negocio modesto,
en una imprenta de imprimir papel de dinero.
En lo que hice tuve algo de mérito. Pero, yo era un joven que sólo
aspiraba a pretender e intentar mejorar el estado de cosas de Ceuta, a través
de la información, creando opinión al ciudadano ceutí sobre los asuntos
cotidianos de su tierra.
Ahora bien, el verdadero artífice de mi trabajo democrático, de
verdad y no de mentira, fue mi querido padre Joaquín. Él, permitió que, durante
5 años, manejara el timón de la nave de
"El Faro", a mi entender y saber profesional.
Era mi padre y propietario del periódico, a la vez. Sin embargo, nunca
leyó " El Faro" antes de su publicación, comportándose siempre como
un lector más. Su condición de dueño del diario, por muy padre mío que fuera,
no hizo nunca jamás, que ejercitara presión sobre mi periodismo auténtico. Ni
censura alguna. Ni me hizo recurrir al ayuntamiento para salir de modestos, a
cambio de hipotecas políticas, a cambio de escribir al dictado del alcalde de
turno.
Hizo la guerra con Franco en Asturias. Para mí, su actitud de
respeto hacía la democracia, la verdadera y no la de juguete o mentira, supera
con creces a todos estos que van y vienen, ahora y antes, con la historia
confusa y confundida de la
Constitución , como si fueran demócratas. Los mismos que han
hecho de la norma de las normas, papel mojado. Los mismos que distorsionaron y
viciaron sus contenidos, en un escandaloso aprovechamiento personal. A los 35
años, camino del espacio de tiempo de otra dictadura, hablan con palabras de
santos y santas, de devoción y clausura.
Es por la mañana y me encuentro por Plaza de los Reyes, cuando
observo que la gente recoge de la floristería Lara, que existe en el lugar,
bonitos ramos de flores de color blanco. Con mi clásico despiste no relaciono
el motivo de aquello, pues el día de los Difuntos, había quedado atrás. Se
trataba de que dichos ramos eran para depositarlos como homenaje a la Constitución. De
haberlo sabido, cojo uno y me lo llevo a casa, para hacerme presencia y aroma.
De ser serios, el acto simbólico de las flores, debería de haber
sido en señal de enterramiento, de duelo. La Constitución murió en
la propia Transición.
Queda, eso sí, "puentes" como el que hemos, han
disfrutado. De algo, y para algo, vale pues. Amén.
Ya se sabe que la autentica democracia se quedó en el camino...una pena.
ResponderEliminarEl señor delegado del gobierno y compañía celebraron el acto del día de la "constitución" un día antes, me imagino que para no tener que ir el día que era fiesta...ni ellos mismos creen en la constitución ya que no la celebran en su día.
Hoy los ideales y la lucha por un mundo, en este caso un país mejor, han quedado reducida a DON DINERO Y PODER, los políticos hacen de todo menos política.